A bordo del PEUGEOT EXALT cada ocupante se siente resguardado de una manera privilegiada, tanto desde el puesto del conductor como desde el de pasajero.
El PEUGEOT i-Cockpit dispensa una experiencia de conducción intensa dedicada al placer. El volante compacto forrado de cuero y de tejido chiné, así como la pantalla digital alta, están puestos en el eje del conductor para una toma de contacto y lectura intuitivas. En el prolongamiento de la consola central, dos pantallas táctiles escamoteables emergen del panel de instrumentos. La pantalla superior da acceso a las funciones como las del ordenador de a bordo, el sistema HiFi o el navegador. La segunda pantalla tiene una banda visible permanentemente para gestionar la climatización automática y el sistema Pure Blue. Para facilitar la conducción, nueve Toggle Switches se han implantado en el panel de instrumentos evocando por su diseño el universo de la música. El conductor puede asignarle las funciones que el desee. Puede por lo tanto tener un control centralizado de todos los mandos y conducir con más tranquilidad.